Nada… Estamos frente a la pantalla o el papel y … nada. Parece que nuestro cerebro se hubiera ido a pasear fuera de nuestro cráneo porque NO ESTÁ RESPONDIENDO. ¿Qué hacemos en esos momentos donde llevamos media hora tratando de escribir una oración y no avanzamos más de dos letras? Estas son algunas de las alternativas que me han funcionado.   ¡Qué feo se siente cuando sabemos que tenemos que avanzar  con el trabajo, que hay una fecha con la que cumplir y no sale nada de nuestra mente! Suele darse esta situación de dos formas principalmente: blanco total (“crik, crik” y su eco en nuestra mente) o nos…